Desde este martes Santander circulará al paso de las tortugas tras la entrada en vigor de las nuevas limitaciones de velocidad en al Capital cántabra con máximos de 20 o 30 km/h, según el tipo de vía por la que se circule, estando limitado a 40 km/h en calles de doble sentido y con varios carriles.
La nueva normativa que ha impuesto la Dirección General de Tráfico (DGT), que dirige el socialista Pere Navarro, establece estos nuevos límites en las ciudades que es muy probable que dificulten la fluidez del tráfico al establecer unos límites poco comprensibles para los conductores habituales.
Llegó a la DGT de la mano de José Luis Rodríguez Zapatero y estuvo durante dos legislaturas al frente de la misma, implantando entre otras limitaciones la reducción en autopistas la velocidad máxima 110 que posteriormente fue revocada con la legada de el PP al poder.
El pasado viernes, el Ayuntamiento santanderino adaptaba las señales a los nuevos límites de velocidad en vías urbanas derivados de la modificación del Reglamento General de Circulación (Real Decreto 970/2020) que entra en vigor hoy que va a hacer que en la mayoría de las calles de la capital cántabra no se puedan superar los 30 kilómetros por hora.
El concejal de movilidad, César Díaz, recordaba el pasado día 8 que los nuevos límites de velocidad son de 20 kilómetros por hora en calles semipeatonales que dispongan de plataforma única de calzada y acera, así como en zonas escolares o 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación.
Además, se podrá circular a 40 km/h en vías de dos o más carriles por sentido de circulación, excepto la avenida de la Constitución (S-20) o autovía del Sardinero, que estará limitada a 50 km/h.