El presidente regional, Miguel Ángel Revilla, se ha mostrado contrario a la decisión de la Juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Santander, María del Prado García Bernalte que deja en libertad al joven de 20 años detenido la semana pasada por la agresión a un médico en el centro de salud Los Castros de Santander.
Revilla ha dicho que respeta las decisiones judiciales, pero a su vez ha mostrado su disconformidad con el auto dictado por la Jueza, porque «no se puede tolerar que aquellos servidores públicos que están en primera línea de combate contra enfermedades, que han pasado dos años durísismos luchando contra pandemia, se encuentren sentencias tan demoralizantes».
La Jueza, María del Prado García Bernalte, fue muy clara en el auto dictado ayer al señalar que no se podían adoptar medidas judiciales por «presiones mediáticas, políticas o de cualquier otro tipo» que lleven a adoptar decisiones no «suficientemente justificadas».
Para el presidente del Ejecutivo cántabro «la presión es la que están teniendo cantidad de médicos en una situación complicada donde la gente está muy enfadada» y además se ha mostrado «totalmente» solidario con la posición del Colegio de Médicos de Cantabria que ha pedido «un castigo ejemplar» para el presunto agresor.