La sesión del Parlamento de Cantabria de este pasado lunes ha servido de nuevo para ver el claro distanciamiento que hay entre el Gobierno regional y los partidos que lo componen (PRC-PSOE) y la oposición, principalmente en cuanto a las medidas adoptadas contra el hostelería por la pandemia a la que a día de hoy siguen manteniendo cerrada el interior de sus locales a pesar de que ya no queda ninguna comunidad que tenga esta medida en vigor.
El Presidente regional, Miguel Ángel Revilla, respondía ayer al Partido Popular que dejara de hacer «carroñerismo» con este conflicto, advirtiéndoles que esta actitud puede tener «consecuencias» señalando además que no cree que haya faltado el respeto a los hosteleros como le acusaban ayer los populares .
La oposición le acusaba de «faltar al respeto» a los hosteleros con su reacción ante las protestas que han tenido lugar el día de su vacunación y con la conmemoración del 30 aniversario del Palacio de Festivales, y de no tener «empatía» con su «sufrimiento» y de tener una actitud «soberbia».
Revilla les indicaba que «hacer de esto carroñerismo… mala cosa ¿eh?, mala cosa porque esto va a tener consecuencias. La postura que están tomando ustedes, sobre todo con sus aliados es grave porque están entrando en una materia muy delicada y, a lo mejor, esto tiene consecuencias«.
El líder regional, además ha negado las acusaciones de la oposición y cree que no tiene que disculparse con el sector, al que ha dado «todo su respeto y apoyo», aunque reconoce que lo económico, el Gobierno regional «no puede atender todo» lo que necesitan porque las necesidades son «infinitas» y las posibilidades del Gobierno «limitadas», según Revilla.
Miguel Ángel Revilla volvía a «echar balones fuera» con el cierre del interior de los locales de hostelería porque insistía que «en una pandemia es sanidad la que determina que es lo que hay que hacer» y son los técnicos de Sanidad los que determinan que hay que hacer asegurando que no hacerles caso de ello sería «prevaricar» y acabar en los tribunales.
Por último, Revilla ha afirmado que el nivel de la sanidad de Cantabria y las medidas que ha adoptado la comunidad durante la pandemia han evitado que murieran alrededor de 700 personas más.