Las grandes fábricas de la Comunidad cántabra, no pueden más y han decidido parar como consecuencia de los altos precios de la electricidad que eleva los costes de producción a precios imposibles de asumir.

La decisión no tiene una fecha de vuelta a la actividad concreta, pero mientras los precios de la luz y del gas sigan manteniéndose como hasta ahora, no volverán a poner en marcha las cadenas de producción de sus fábricas, especialmente entre las plantas electrointensivas, es decir, las que demandan mayor consumo de electricidad para tener activos sus procesos de producción.

La primera en anunciar que tenía que parar ha sido Forgings & Castings por el elevado coste energético que hace imposible cuadrar sus cuentas a la empresa de Reinosa, por lo que la empresa ya está trabajando en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que le permita aguantar el golpe de momento, con contratos a largo plazo que les impide poder subir los costes a sus clientes.

Ferroatlántica es otra de las empresas afectadas por la situación del precio de la energía eléctrica y el gas. La empresa ubicada en Boo de Guanrizo ya tuvo que cerrar un horno en septiembre a dos en noviembre.

En el inicio de año, en enero, tuvieron que parar la tercera de las cuatro calderas del recinto con la expectativa puesta en poder ponerla en marcha de nuevo en abril con una posible rebaja del precio de la luz, pero la guerra en Ucrania ha desvanecido esas previsiones con precios que jamás se podían haber imaginado.

En los últimos días había reducido el uso del único horno disponible, operando sólo de noche y a mediodía, cuando las tarifas eléctricas eran más bajas, y ya desde este pasado martes la factoría está totalmente parada ante los disparados precios de la luz, con una plantilla, que supera los 500 trabajadores, al margen de las contratas externas.

Otra de las grandes industrias de la región como Global Steel Wire, ubicada en Nueva Montaña, ha llegado a un acuerdo con los sindicatos para parar desde este jueves a la espera de cómo van desarrollándose los precios en la energía eléctrica.

Ya se había prorrogado previamente el ERTE, que su tuvieron que firmar en el 2020 como consecuencia de la pandemia y que llegará hasta septiembre de 2023. El fin de semana pasado, GSW ya había realizado una parada en su producción.

La fábrica de estufas ubicada en Soto de la Marina, Hergom dejaba de operar también este jueves también como consecuencia de los precios de la energía y que en principio puede ser durante dos días aunque no se descarta que se pueda prolongar a la espera de la evolución de los precios energéticos.

Bondalti, Cementos Alfa o Nissan también se están viendo afectadas por los precios de las energéticas aunque de momento no han parado sus producciones aunque los ERTE también están siendo el principal arma para aguantar la situación.

Ante esta situación, Cristóbal Palacio, portavoz del grupo Vox en el Parlamento de Cantabria, ha pedido la comparecencia «inmediata» del consejero de Industria, Javier López Marcano, para que explique «qué medidas» se están adoptando ante la «tormenta perfecta» derivada de la guerra.