La Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria (AEHC) ha pedido la dimisión del Presidente regional, Miguel Ángel Revilla por la comida llevada a ha llevado cabo ayer en el interior de un restaurante de la capital cántabra donde se sentó a comer y a fumar un puro en el interior de un negocio de hostelería», actividad «prohibida» por Sanidad según ha dicho Ángel Cuevas, presidente de los hosteleros cántabros.
Cuevas, además ha señalado que han denunciado ante la Consejería de Sanidad lo ocurrido ayer en ese restaurante de Santander indicando «hay que tener muy poca vergüenza» para pedir medidas a los ciudadanos y que Revilla, que es «el que las hace», es «el primero que se las salta».
Desde la Asociación de Hostelería consideran «los hechos muy graves, sobre todo por tratarse de su protagonista y de sus posteriores declaraciones diciendo que no había fumado» y le han pedido a Revilla que se vaya «a su casa» porque «es fácil ver los toros desde la barrera y no jugarse el pan del día a día como hacen las 7.000 familias de hostelería de la región».
En su intervención, Cuevas, aclaraba que el Restaurante no cumplía la norma porque la resolución del Boletín Oficial de Cantabria (BOC) del 18 de junio de 2020, en su artículo 17.4, se consideran ‘terrazas al aire libre’ todo espacio no cubierto o todo espacio que estando cubierto esté rodeado lateralmente por un máximo de dos paredes por lo que «siempre tiene que tener dos lados completamente abiertos y ayer se vio claramente que no era así».
«Cómo se puede tener tan poca vergüenza de poner restricciones a un sector con miles de familias, 7.000 negocios, que se están muriendo de hambre?» se preguntaba Cuevas, indicando que haya hosteleros que le han dicho que tienen que elegir entre pagar la cuota de autónomo o el carro de la comida y que han elegido esto último.