Como una «aprehensión histórica» era calificado por el delegado especial de la Agencia Tributaria en Cantabria, Miguel Cárcaba, el alijo de dos toneladas de cocaína incautados este miércoles en un velero a 25 millas del Puerto de Santander, donde ahora se encuentra atracado.
Según Cárcaba, el alijo ha sido interceptado a las 12 de la noche del martes a 25 millas de la vertical de Santander, hasta donde el servicio de Vigilancia Aduanera ha remolcado al velero.
En su información, el delegado especial de la Agencia Tributaria en Cantabria, indicaba que hace varios días que se recibió una comunicación, procedente del Reino Unid, sobre un barco que iba cargado de cocaína cuyo destino era el norte de España, por lo que activó a los servicios aduaneros del mar de varias comunidades autónomas.
A pesar de la dificultad para encontrar a la embarcación al no llevar activos los medios de localización por radar y tras muchas horas de búsqueda, en plena noche, una patrullera de Vigilancia Aduanera, dio con el velero y lo abordaron.
«No hubo resistencia», relataba Cárcaba, «por parte de los cuatro tripulantes del barco que transportaba la droga» que son un español, dos venelozanos y un colombiano, que desde el primer momento confesaron la cantidad de cocaína que transportaban.
Una vez tomado el mando del velero fuer dirigido al Puerto de Santander donde se encuentra custodiado a la espera de que se inicien las actuaciones administrativas y judiciales pertinentes para su intervención y descarga de la cocaína.
El delegado especial de la Agencia Tributaria señalaba la dificultada de encontrar el velero porque «navegaba sin luces para no ser localizado y la mar estaba este martes en malas condiciones. La búsqueda llevó varias horas» y ha ñadido que esta captura quizá pueda ser indicativo de «un cambio de tendencia» en las rutas por las que entra la droga en España, «ya que esta no es una ‘ruta caliente’, como las que las policías del sur están acostumbradas a controlar».