Agentes de la Unidad la Unidad de Inspección Pesquera, dependiente de la Dirección General de Pesca y Alimentación, de la Consejería de Desarrollo Rural, interceptaron ayer a un pescador furtivo que transportaba en el maletero de su vehículo un total de 7 kilos de percebes extraídos sin autorización en los acantilados de Tagle, en el término municipal de Suances.
Esta actuación, que se enmarca en las labores de vigilancia contra el furtivismo y la pesca ilegal de marisco que realiza habitualmente la Unidad, contó además con la colaboración de la Policía Local de Suances, que estuvo prestando apoyo durante el operativo.
El pescador mostró actitud de desobediencia hacia los agentes actuantes, motivo por el cual se ha procedido a la tramitación de la denuncia por desobediencia a la autoridad, además de la correspondiente por infracción a la Ley de Pesca de Cantabria.
Los percebes decomisados fueron entregados a Cáritas para su destino a fines benéficos, siguiendo el protocolo establecido por la Dirección General de Pesca y Alimentación en estos casos.
La Dirección General de Pesca y Alimentación ha recordado que la extracción de recursos marinos sin autorización constituye una práctica ilegal que pone en riesgo la regeneración natural de las especies, perjudica al sector pesquero profesional y atenta contra la conservación del medio marino.
Asimismo, la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación ha reiterado su compromiso con la protección del litoral y continuará reforzando las labores de inspección y control para erradicar el furtivismo y garantizar el cumplimiento de la normativa vigente.
