El Gobierno de Cantabria, por iniciativa de la Consejería de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, ha concedido una subvención directa de 30.000 euros a cada una de las 21 empresas y autónomos de ocio nocturno que acudieron a la convocatoria regulada por decreto y publicada en el BOC el pasado mes de septiembre.
En total han sido 630.000 euros con los que la Consejería dirigida por Javier López Marcano pretende aliviar los efectos económicos derivados de las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias para contener la epidemia de la COVID-19, y que en este caso fueron principalmente el cierre de los locales impuesto por el toque de queda.
Marcano ha defendido la necesidad de articular un nuevo régimen de ayudas directas a los empresarios y autónomos, dirigidas en este caso a apoyar el mantenimiento de la actividad del sector del ocio nocturno, que en su criterio “constituye sin duda uno de los más afectados por las citadas medidas, dada la imposibilidad de abrir sus locales”.
Los empresarios de ocio nocturno habían solicitado ayudas de este tipo ya que se adoptaron medidas sanitarias que obligaron a cerrar discotecas, salas de bailes y bares de copas. Marcano considera que el ocio nocturno ha sido especialmente castigado y era de justicia que se adoptaran medidas especiales que ayudaran a mitigar el impacto causado por esta crisis sanitaria
El consejero ha reconocido que el daño económico sufrido por parte de estos empresarios ha sido en ocasiones impactante en la evolución de sus respectivos negocios y por eso ha defendido procedimientos para las ayudas lo más “ágiles, directos y eficaces” posible que pueda permitir el obligado control al que está sometida la Administración. “Aunque 30.000 euros no solucionen todos los problemas, confiamos en que al menos pueda contribuir a mantener la actividad empresarial”, ha dicho el consejero.
