Un nuevo frente se ha abierto entre los dos socios de Gobierno en Cantabria, PRC Y PSOE, en esta ocasión en el ayuntamiento de Arredondo, donde los tres ediles socialistas, junto con el edil que fue expulsado del PRC, José Francisco Villegas, han registrado una moción de censura contra el alcalde, el regionalista Leoncio Carrascal, acusándole de haber creado una «red clientelar y partidista», de «ningunear» e incumplir los acuerdos aprobados en Pleno.
Además, le acusan de una «mala gestión» y de «dejadez de funciones», además de haber «favorecido intencionadamente a colectivos afines» y no dar respuesta a las peticiones de información por parte de la oposición y de ocultar procedimientos de proyectos como los de implantación de parques eólicos, entre otros asuntos.
En el escrito de la moción de censura, publicado por el PSOE de Arredondo, los firmantes piden a la Secretaría General comprobar ésta se ajusta a la legalidad e los trámites para convocar un Pleno extraordinario y votarla.
La oposición propone que Leoncio Carrascal sea sustituido por el socialista Evaristo Canales, uno de los cuatro firmantes de la moción junto a Silvia González, Alejandro Manteca y José Francisco Villegas.
EL PRC INDIGNADO
Desde el PRC han tachado de «inexplicable» que estos ediles hayan registrado esta moción tras un Pleno celebrado el viernes en el que los regionalistas aprobaron un reconocimiento extrajudicial de crédito gracias a la abstención del PSOE. Además, han criticado que hayan aprovechado la baja médica del alcalde para presentarla y aseguran que «no se ajusta a lo establecido en la ley para que prospere».
La secretaria de Organización del PRC, Paula Fernández Viaña, mantuvo ayer una reunión con integrantes del Comité Local de Arredondo y solicitó al PSOE cántabro la expulsión inmediata de los tres ediles socialistas «por apoyarse en un tránsfuga» para presentar dicho escrito.
Los regionalistas han lamentado que los ediles del PSOE «quieran repetir la misma insensatez del municipio de Guriezo, donde el caos y la ineficacia se ha instalado» tras la moción de censura que sacó de la Alcaldía al regionalista Ángel Llano, sustituido por María Rivero -expulsada del PSOE-, y «donde los grandes perjudicados son los vecinos».