Toda la hostelería y el ocio nocturno de Cantabria está pendiente de la resolución que adopte este lunes la Consejería de Sanidad del socialista Miguel Rodríguez, tras analizar el famosos semáforo covid, ya que está previsto, como anunció el pasado jueves, que cierre la el ocio nocturno en aquellos municipios que alcancen el nivel 2 de alerta sanitaria.
Lo cierto es la incertidumbre para estos negocios es total teniendo en cuenta que este viernes es noche vieja y se tendrían que estar preparando los cotillones para esta fecha y sobre todo ver como se estipula su cierre cuando el pasado 15 de diciembre, una resolución del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) desautorizaba al Consejero de Sanidad para poder adoptar este tipo de medidas «NULA» la Resolución de fecha 15 de agosto de 2020 por la que “Se suspende la apertura al público de las discotecas y salas de fiestas, bares especiales, pubs y whiskerías».
El TSJC se basa para ello al determinar que tras la sentencia del TC, se constriñe sustancialmente con las medidas adoptadas y por otra que el régimen de delegación de atribuciones para dictar normas restrictivas de este derecho, no alcanza a las facultades o competencias de un Consejero de una Comunidad Autónoma.
Por eso, no se entiende muy bien que haya anunciado esta medida el pasado jueves sin tener en en cuenta esta resolución del Alto Tribunal cántabro que le desautoriza para tomar este tipo de medidas.
La Asociación de Hostelería ya ha anunciado que una vez conocida la resolución de Sanidad, y se produce ese cierre lo recurrirán ante el TSJC para que anule esa resolución y se pueda seguir manteniendo abierto el ocio nocturno en Cantabria
