Esté domingo día 31 de marzo ha entrado en vigor el horario de verano, por el que se adelanta una hora, algo que ocurría esta pasada madrugada cuando los relojes macaban las 2:00 horas pasaron a señalar las 3:00 horas.
El cambio de hora seguirá sucediendo hasta 2026, cada madrugada del último sábado-domingo de marzo, cuando se pasará al horario de verano y cada última madrugada del sábado-domingo de octubre, para iniciar el horario de invierno.
El cambio de hora en Europa se remonta a la década de los 70, con la primera crisis del petróleo, cuando algunos países decidieron adelantar el reloj para aprovechar mejor la luz natural del sol y consumir menos electricidad en iluminación. Desde 1981 se aplica como directiva que se renovaba cada cuatro años hasta la aprobación de la Novena Directiva, del Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión, en enero de 2001, que establece el cambio con carácter indefinido.
La organización Time Use Initiative (TUI), sin ánimo de lucro, ha exigido el fin del cambio de hora en Europa en los programas electorales que se presentarán de cara a las próximas elecciones en Parlamento Europeo que se celebrarán el 9 de junio.
La petición de la plataforma, cuyo principal objetivo es fomentar el debate público sobre cómo organizar colectivamente el tiempo para mejorar el bienestar de los ciudadanos, coincide con el cambio de hora en los relojes europeos este 31 de marzo. La plataforma propone poner fin al cambio de hora estacional para 2026, una de las 12 medidas incluidas en el Manifiesto de la UE sobre políticas de tiempo impulsado por la TUI para garantizar el derecho al tiempo en Europa.