El Racing de Santander y el Gobierno de Cantabria formalizaban este viernes la recompra de la marca ‘Racing’ que en el año 2006 adquiría el Ejecutivo regional a través de la Oficina de Proyectos Europeos por un valor de 17 millones de euros, que el club verdiblanco debía ir pagando con intereses en cuotas anuales de 2 millones de euros durante diez años y que nunca se llegó a cumplir.
Este viernes tras 17 años de la marca «Racing» en manos del Gobierno de Cantabria, se anuncia que vuelve la marca al club, pero no se conocen las cifras de la operación, que deberían ser públicas porque se pagó con el dinero de todos los cántabros para sanear el club que hubiera desparecido de no ser así.
Según el Gobierno, por medio de su consejero de Economía, Luis Ángel Agüeros, con esta operación se «asegura» la recuperación del coste económico real de la marca, «regularizándose de manera definitiva» la deuda que el club mantenía con el Ejecutivo.
Desde el Racing destacan «el cariño y la sensatez» que ha tenido el Gobierno de Buruaga además de «la sensibilidad con la que han encarado las negociaciones para alcanzar el acuerdo que se ha firmado entre ambas instituciones», pero sin detallar las condiciones del acuerdo.
El Racing siempre se ha beneficiado de las instituciones públicas tanto del Gobierno de Cantabria con patrocinios que exceden lo que puede tener en valor la publicidad que ofrece el club, como con operaciones económicas que han supuesto la salvación de la entidad verdiblanca con dinero de todos los ciudadanos de la región.
El Ayuntamiento de Santander, también colabora de forma generosa con un club privado como es el Racing, cediendo unas instalaciones para uso exclusivo sin pagar un euro como son los Campos de Sport del Sardinero, y de su mantenimiento, que en los últimos años ha sido cuantioso en la restauración de las instalaciones, así como la cesión de los terrenos donde están instalados los campos de entrenamiento «Nando Yosu» en La Albericia de propiedad municipal.
Lo cierto es que desde que el PP y el Gobierno actual de María José Sáenz de Buruaga están al frente de la región, la relación entre el Racing, y en su caso Manolo Higuera, y el Ejecutivo, en su caso Buruaga, tiene acuerdos económicos muy beneficiosos para una entidad privada como el el club verdiblanco.