El Partido Popular (PP) se ha aliado con el PRC y el PSOE, para tumbar la Proposición No de Ley (PNL) de Vox que pedía imponer el pin parental en los colegios de educación primaria en Cantabria para que los padres pudieran elegir la educación que quieren para sus hijos en algunas materias como la sexualidad.
Vox pretendía con esta PNL, que los padres pudieran autorizar algunos de los contenidos que imparten en los colegios de la región para evitar el «adoctrinamiento» y «manipulación» en la aulas al entender que son contenidos «ideológicos».
«Están tragando como lluvia fina, que va calando», señalaba la portavoz de Vox, Leticia Díaz, sobre algunos contenidos como el feminismo, la sexualidad o la Agenda 2030, que se están impartiendo a los niños al aplicar el nuevo modelo educativo y que en vez de solucionar el problema está provocando «más violencia contra la mujer, más suicidios, más menores que acaban delinquiendo y participando en manadas».
Díaz se preguntaba si «¿vamos a dejar, que les digan a nuestros hijos ‘éste es el catalogo de sexos o de orientaciones sexuales, escoge’?» y les indicaba a los diputados que deberían preocuparse «por que el acceso a la pornografía ha bajado a los ocho o nueve años y porque la normalización de toda esta autodeterminación de genero está llevando a cada vez más y peores delitos».
Y es que para Vox «ya hay un pin sobe la imagen, pero no queremos un pin sobre la conciencia. Por eso no nos escandaliza que haya padres que digan ‘mi hijo no sale en la foto’, pero sí nos escandaliza y nos rasgamos las vestiduras cuando un padre dice ‘no quiero que reciba una charla que sé que va a confundirle y generarle un daño en su conciencia'».
PP, PRC y PSOE, se han sumado en las críticas a la propuesta de Vox señalando que «dibuja una realidad que en Cantabria no existe» y corresponde más a una estrategia nacional de la formación la imposición de este pin parental, porque para los populares ya hay capacidad de elección de centro donde estudiar «pero eso no significa ni que tengan que fiscalizar las decisiones docentes ni socavar su criterio o autoridad» y «no cabe socavar de ninguna manera la confianza que las familias depositan en los centros».
Los regionalistas por su parte acusan a Leticia Díaz de «faltar el respeto a miles de enseñantes que hacen su trabajo sin adoctrinar» y ha añadido que «me niego a que el profesorado se tenga que someter a la aceptación previa» de los padres.
En este mismo sentido los socialistas mostraban su rechazo porque «no se puede dejar la educación en manos de Vox» calificando de «barbaridades» los dicho por Leticia Díaz y cree que el problema de Vox es «que no siguen sus dictados ideológicos, afortunadamente».