El Partido Popular (PP) ha anunciado que realizará una enmienda a la totalidad de los Presupuestos Generales de Cantabria para 2023, al entender que no están pensados para responder a los problemas de los cántabros sino a “los intereses electorales de un Gobierno PRC-PSOE que vive de espaldas a la realidad y actúa a golpe de anuncio y titular”, coma así ha señalado su presidenta del Partido Popular, María José Sáenz de Buruaga.
“Creo que este es el presupuesto de un Gobierno agotado que vive totalmente de espaldas a la realidad y del que no podemos esperar otra cosa que una lluvia corta de subvenciones, mucha propaganda, primeras piedras y nada más”, señalaba la líder de los populares cántabros.
Para Buruaga es presupuesto “ficticio”, por eso a su partido “no le queda otra opción” que mostrar su “profunda discrepancia” y llevar a cabo un debate de totalidad para que “los cántabros sean conscientes de lo mal que Cantabria está siendo gobernada” y que se sepa que esta coalición de Gobierno de Miguel Ángel Revilla (PRC), con el Partido Socialista no tiene “ninguna intención de cambiar de rumbo porque sus cuentas para 2023 son más de lo mismo, otra oportunidad perdida”.
De todas la razones que hay para rechazar este presupuesto, Buruaga destaca dos como son que no solo no baja impuestos, sino que los sube al negarse a deflactar los impuestos a la inflación en el momento de mayor recaudación de la historia, al tiempo que “siguen asfixiando a impuestos a los ciudadanos y les despachan con una mal llamada rebaja fiscal que en realidad es una broma de mal gusto”.
“Mienten cuando nos dicen que bajan los impuestos y nos los suben; mienten en las promesas de inversión que primero recortan y después no ejecutan; mienten en los gastos esenciales sistemáticamente infradotados y mienten en las previsiones económicas, lo que convierte a estas cuentas en irreales y de imposible cumplimiento. Papel mojado”, indicaba Buruaga, porque son unas cuentas son un “escenario ficticio, montado sobre la utopía de un crecimiento del 2,1% que ha sido desautorizado por todos los organismos nacionales e internacionales en España y en Cantabria”.
El segundo de los motivos para estar en contra de estos presupuestos es que un año más no se dota a los servicios públicos esenciales de los recursos y la financiación suficiente para garantizar su adecuado funcionamiento, especialmente en lo referente a la Sanidad.
Y es que Buruaga tiene claro que las cuentas de Sanidad son una réplica exacta de las de años anteriores, “serán un lastre en la gestión” lo que hace que sea “imposible” corregir los déficits estructurales que arrastra el servicio público de salud, porque “ni afrontan los problemas de una Atención Primaria al borde del colapso, ni planifican ni ordenan eficazmente los recursos humanos, ni abordan la reducción de las listas de espera en atención especializada, ni impulsan la mejora de infraestructuras sanitarias, ni avanzan en la puesta en marca de la unidad de protonterapia”.