El Parlamento de Cantabria ha tomado ahora la «bandera» del famoso tren a Bilbao, a sabiendas que no existe en la actualidad presupuesto para su construcción, aunque han aprobado una iniciativa que pide al Gobierno central «garantías» para la ejecución del proyecto del tren entre Santander y Bilbao.
Además, también ha aprobado otra por la que le insta al Ejecutivo de Pedro Sánchez, a establecer un plan de transporte alternativo ante los continuos problemas de los Cercanías en la región, que facilite otro medio a los viajeros cuando haya retrasos y averías.
El PP ha sido el propulsor de la primera de las iniciativas que finalmente han aprobado todos los grupos que forman el Parlamento cántabro. La segunda, que fue presentada por Vox, contó sólo con el voto en contra del PSOE.
El Parlamento se ha mostrado favorable a establecer una nueva línea ferroviaria entre Santander y Bilbao que reduzca a una hora el trayecto entre ambas ciudades, de carácter mixto, es decir pasajeros y mercancías y que sólo haga paradas en Castro Urdiales y Laredo, cuyo coste sería de 2.500 millones de euros, que ahora mismo es inviable por no tener financiación.
Con esta iniciativa, pide al Gobierno regional a suscribir un protocolo con el Ministerio de Transportes, Movilidad Sostenible y Agenda Urbana (Mitma) para que se tramite del proyecto, donde se establezcan plazos y un calendario que incluya iniciar el trámite de información pública en la actual legislatura, es decir antes del 2023, y posteriormente, en la siguiente, tramitar la declaración e impacto ambiental.
Tanto para el PP como los otros dos partidos de la oposición, Cs y Vox, temen que este proyecto sea «otro engaño electoral» porque «nos han estado engañando desde 2008» con el tren y sigue sin haber «ningún compromiso», indicando que «de nada sirven anuncios y anuncios si luego no se ponen en marcha».
Y es que para los populares el Gobierno de Miguel Ángel Revilla «tiene un historial lleno de cuentos», aunque para el portavoz del grupo regionalista, Pedro Hernando, este tren es «la apuesta decidida del PRC».
CERCANIAS
La propuesta de Vox, que contó con el voto en contra del PSOE, propone un plan de transporte alternativo de manera que, ante retrasos previstos de más de 30 minutos, se facilite a los usuarios un transporte por carretera a los distintos destinos sin coste alguno para los mismos.
Además, la propuesta incluye que si el retraso es de más de 15 minutos, se reembolse el importe del billete a los usuarios, así como que se actualicen y modernicen las unidades ferroviarias que prestan servicio en Cantabria a la mayor celeridad posible.
En este sentido el portavoz de Vox Cristóbal Palacio, ha reprochado que «los partidos de izquierdas se llenan la boca» con la necesidad de fomentar el transporte público «mientras lo que hacen es desincentivar» su uso y «obligar a coger el coche privado», por eso «de nada sirve apoyar de boquilla» y no hacer nada.