El nuevo consejero de Sanidad de Cantabria, Raúl Pesquera, ha tomado este jueves posesión del cargo en un acto en el que ha asegurado que viene «a sumar» y dispuesto a lograr «la mejor» atención sanitaria.

Lo ha destacado tras jurar el puesto ante miembros de su departamento y todos los compañeros del Gobierno, al que se incorpora tras la dimisión de su antecesor, el también socialista Miguel Rodríguez, por motivos «personales» y «políticos» también, como «discrepancias» con Economía por la financiación sanitaria.

En la toma de posesión, Pesquera ha agradecido y reconocido el «trabajo, dedicación y confianza» del consejero saliente, y se ha comprometido a continuar los proyectos pendientes así como a afrontar otros nuevos, entregándose «en cuerpo y alma» -ha dicho- al cargo.

También ha intervenido el vicepresidente del Ejecutivo, Pablo Zuloaga, y el presidente y líder del PRC, Miguel Ángel Revilla, quien ha marcado a Pesquera cuatro grandes retos, entre ellos sacar adelante la unidad de protonterapia del Hospital Valdecilla.

Y el hasta ahora gerente de la Fundación Valdecilla ha garantizado, a preguntas de los medios sobre la licitación del pliego de condiciones -tras quedar desierto el concurso-, que «va a salir» y «lo más pronto posible» además, ya que es de los objetivos a corto plazo «el primero» que está sobre la mesa.

«No tardará muchas semanas y si no puede ser la próxima semana, será la siguiente. Pero vamos a ser los primeros», ha afirmado Pesquera. La semana pasada, Revilla avanzó que en abril se licitará la compra de la máquina de protonterapia por 28,5 millones de euros.

La mejora de la Atención Primaria, el Plan de Salud Mental y reducir las listas de espera son los demás ‘deberes’ que el presidente ha puesto al nuevo consejero, que ha añadido otro: la estabilización de personal, el reto «más importante» desde el punto de vista de recursos humanos y que conlleva además «tratar de recuperar todos los puentes que hemos perdido con la pandemia».

Pesquera -que es sindicalista y médico de profesión– ha asegurado que va a trabajar y sentarse con los representantes de los empleados. «Forma parte de mi talante, de mi forma de ser y yo voy a bajar a pie de pista», ha expresado antes de evidenciar que tendrá que «delegar muchas cosas» pues «el consejero no puede estar en la negociación pura y dura, pero sí tiene que estar encima».

Sobre las «discrepancias» de su antecesor con la consejera de Economía y Hacienda y compañera de partido, María Sánchez, Pesquera no lo ve así y aprecia más bien «diferentes puntos de vista».

Pero en cualquier caso, ha subrayado la «buena» relación que tiene con ella -«no puede ser mejor», ha enfatizado- y ha indicado sobre el presupuesto de Sanidad que «si no le hay, le pintaremos», con la «colaboración» de todos los miembros del Gobierno y la «complicidad» de la responsable de Economía.