El consejero de Sanidad, Raúl Pesquera, ha asegurado que Cantabria será la primera comunidad que tenga la unidad de protonterapia, tras conocerse que dos empresas se han presentado al concurso puesto en marcha por el Gobierno regional, para su instalación en el Hospital Universitario Marqué de Valdecilla (HUMV).
Pesquera indicaba este miércoles, que la próxima semana pretende autorizar la licitación de la dirección de obra del proyecto, por lo que “no me cabe ninguna duda” de que los plazos para su ejecución se van a cumplir.
“Creo que vamos en plazos”, ha dicho el consejero de Sanidad, porque que la próxima semana espera que se pueda autorizar la licitación para la dirección de obra, es decir “todo en los plazos que habíamos concretado”.
PLAZOS
Tras conocerse estas dos ofertas para la instalación de la protonterapia en Valdecilla, las siguientes fases consistirán en la adjudicación y, en función del ganador, se construirá el búnker donde irá instalada dicha unidad.
El proyecto contempla tres fases: la máquina de protonterapia, a la que han concurrido las dos empresas y tendrán que decidir por cual de ellas se decantan y posteriormente, la dirección de obra y la licitación de la obra, que vendrá condicionada por las características del búnker donde vaya ubicada.
Pesquera ha considerado “positivo” el hecho de que no se haya presentado al concurso Hitachi, «Porque ahora ya no es lo mismo, porque cuanto menos se presenten, más podemos ir avanzando y en eso estamos trabajando”.
CONVENIO CON LA RIOJA
El consejero de Sanidad, ha avanzado que en la jornada de este martes pasado se han desplazado a La Rioja para iniciar los contactos de cara a establecer convenios con el fin de que los pacientes de esta comunidad “pueden estar vinculados al objetivo de la protonterapia aquí en Cantabria”.
“La línea sigue igual: la protonterapia va a ser un éxito, vamos a ser la primera comunidad autónoma que tenga protonterapia”, ha enfatizado Pesquera, añadiendo que se está trabajando en el convenio con la Universidad de Cantabria para la formación y docencia, “que es otro de los grandes proyectos que van debajo de la protonterapia”.