Más de medio millar de personas se han concentrado este sábado en Santander en contra del ataque de Rusia a Ucrania, para pedir que cese la guerra y en favor de la paz.

Entre los manifestantes, convocados por la Confederación General del Trabajo (CGT) ante la Delegación del Gobierno en Cantabria, se encontraban numerosos ucranianos residentes en la región, que están viviendo «muy mal» y «con mucha desesperación» el conflicto.

«Son nuestros vecinos, están matando nuestra gente», ha manifestado Lesya Chobotar, que ha ejercido como portavoz de la Asociación Oberig, que engloba a ucranianos que viven en España.

Ha estado acompañada por compatriotas que han seguido la convocatoria desde la otra acera de la calle, junto a Correos, desde donde se han expresado a favor de la OTAN en tanto que quienes la secundaban al lado de la Delegación se han posicionado en cambio contra de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

En lo que sí han coincidido ambos ‘bandos’ es en gritar «no a la guerra», en un momento en el que los asistentes se han juntado en mitad de la calzada, que hasta entonces no se había cortado el tráfico.

Las decenas de ucranianos participantes en la protesta han llamado al presidente ruso, Vladimir Putin, «asesino». Y han avisado, de viva voz y mediante carteles y pancartas, que «es una amenaza para el mundo», por lo que han llamado a la Unión a «despertar» y «reaccionar».

Los integrantes de la agrupación han exhibido banderas de su país -de color azul y amarillo- y distintas pancartas al tiempo que ha coreado diferentes proclamas, en contra de la guerra y de Putin pero a favor de la OTAN.