El Partido Popular (PP) y su líder, María José Sáenz de Buruaga unirán su futuro al frente de la comunidad cántabra al PRC, con el acuerdo de investidura que firmarán este viernes ambas formaciones políticas, ya que tan solo tiene 15 diputados y no alcanza los 18 necesarios para tener mayoría absoluta para poder gobernar en solitario sin tener que llegar pactos con otros partidos políticos y todo a pesar de la campaña que hicieron los populares con carteles que comparaban a Revilla con Sánchez.
El Comité Ejecutivo del PRC ratificaba esta tarde el acuerdo negociado con el PP para facilitar mediante la abstención la investidura de María José Sáenz de Buruaga como presidenta de Cantabria, que tiene como principal condición la “línea roja infranqueable” que supone que Vox no entre en el Gobierno.
El acuerdo será suscrito públicamente mañana por ambos líderes, Miguel Ángel Revilla por el PRC y la propia Sáenz de Buruaga por el PP, en un acto que está previsto para las 11,00 horas en la Sala Polivalente del Parlamento de Cantabria.
Buruaga y el propio Feijóo, han decidido, en contra de la mayoría de sus votantes, que se muestran indignados en las redes sociales, alcanzar un acuerdo con Revilla y su partido el PRC, cuando han estado toda la campaña con discursos en contra del propio Revilla al que han comparado con Sánchez.
A partir de la investidura, Buruaga tendrá que negociar cualquier ley, decreto, proposición no de ley, iniciativas o los presupuestos de la comunidad con el PRC, al cerrarse la puerta con Vox con este acuerdo y ser poco probable que los haga con el PSOE de Zuloaga.
Con este acuerdo la estrategia del PP, ya la marcó este miércoles, el líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, quien tras elogiar a Revilla por no presentar a las próximas elecciones generales del 23-J, que es la de pedir el voto a los simpatizantes y afiliados del PRC.
