A pesar de cumplir con todos sus requisitos legales y de contar con los permisos requeridos, las familias de los alumnos del IES Cantabria, ubicado en La Albericia, acudirán a los juzgados para intentar paralizar la construcción de la gasolinera ubicada junto al centro escolar.
La intención de las familias es solicitar medidas cautelares para paralizar la construcción de la gasolinera próxima al centro y un recurso contencioso administrativo para revocar la licencia de obra del Ayuntamiento de Santander, ante lo que dicen sentirse «abandonadas» por las autoridades.
Lo cierto es según que según el presidente de la AMPA, Gabriel Moreno, tanto el Ayuntamiento de Santander, por medio de sus concejales César Díaz (PP) y Javier Ceruti (Cs), como la consejería de Educación, en declaraciones de Marina Lombó, como la alcaldesa Gema Igual, «están de acuerdo con que no se debiera construir la gasolinera junto al centro educativo», si bien «lamentablemente ni la Dirección General de Salud Pública, ni la de Medio Ambiente ni el vicepresidente nos han recibido».
Al margen de acudir al juzgado, el AMPA piensa llevar a cabo más acciones «para generar masa crítica y aumentar la contestación social», como los viernes que se seguirán haciendo concentraciones en el centro a las 11.00 horas, con la participación de los alumnos del instituto y de colegios cercanos, así como la celebración de asambleas informativas los viernes a las 16.00 horas abiertas a las familias, profesorado y población en general.